En la idea de apego o de relaciones desechables, no esta la base social de la familia, menos la del amor, por lo cual presento las siguientes lineas, para que cada quien tome lo que le es importante y se interrogue en que sentimientos ha terminado lo que alguna vez dijo era amor.
Si no hay voluntad, constancia y actitud no podrá crecer en ti el verdadero amor, no aquel "AMOR" que se dice a cada persona que se vincula a ti, no aquel concepto que se ve desgastado, pues no se conecta lo que se siente con lo que se piensa, no la simple verborrea de decir hola amor, adiós amor, pues cuando en cada relación se repite y se repite, ya no existe el tomar a cada persona como única, se va haciendo tan amplio el concepto y tan pequeño el sentir, que después resulta mas único y personal hablar por el nombre de pila, pues el decir amor, ya no expresa cariño sino simple referencia.
Amamos sin amar,creemos fielmente que amamos al otro, cuando en la mayoría de los casos nos enamoramos del trato que el otro nos da, de su esfuerzo por cumplir nuestras expectativas, de hacer realidad nuestros caprichos y su entereza por cubrir nuestros requisitos, entre mas dependa el otro de nosotros y nuestra aprobación, mas sentimos que le amamos, pero solo alimenta un ego, el que nos hace creer que somos el centro del universo, que nos lleva a solo razonar, no sentir, a querer mas la razón que la verdad y mas incluso que la felicidad.
Buscamos quien nos necesite, no quien nos prefiera, dependemos mas de su apego, nos hemos vuelto desconfiados de amar en libertad, cuando alguien nos ama y no vemos el ¿porque? nos hace sentir miedo e inseguridad, siendo las manifestaciones de esto, la violencia, la ira y el odio.
Por ello cuando se termina la relación, ese al que nombrábamos amor, ahora se vuelve causante de nuestro dolor, le odiamos, le maldecimos, le culpamos de lo que sentimos, pues en realidad el sentimiento del amor estaba solo disfrazado, la base era una necesidad de arrobamiento, miedo a la soledad y/o gusto por controlar
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Cuando se ama, el camino que se elige al terminar la relación es el perdón, para AMBOS, agradecer, perdonar y continuar. ¿A los cuantos errores una madre deja de querer a su hijo? no hay limites, pues se le ama, se puede reprender, se puede castigar, incluso se puede romper la relación, pero la madre siempre mandara sus bendiciones y deseara el bienestar, allí había amor y es un sentimiento que no cambia, menos por sentimientos tan contrarios a el.
¿como es que amamos a tantos y de igual manera?, acaso se es ciego a la diferencia que hay entre cada persona, se es inmutable a la reacción que provoca, cada acción, cada beso, abrazo y entrega.
¿ Podrá existir amor sin voluntad de dejar de lado los miedos infantiles?,¿ los fantasmas pasados ?, sin una actitud que deje de lado prejuiciar o encasillar o colocar al mismo nivel a todas las personas, negando su individualidad y su derecho de ser quienes son ¿?. Hay que tomar una actitud de independencia y alejada del ego, permitirme el acercamiento sin anular al otro, caminar a su lado, no atrás en la constante critica o minusvalía, pero tampoco adelante en la actitud de superioridad, en todo esto hay que ser constantes, todo tiene un tiempo.
Es justo el tiempo que le dediques y la forma en que lo hagas lo que definirá lo que dure y como dure, me marco mucho la imagen que circulo en las redes, donde se le preguntaban a unos ancianos como habían durado toda la vida juntos, cuando le preguntaron ¿como ha hecho? ella contesto en los tiempos que yo nací, las cosas no se reemplazaban, si algo se rompía se arreglaba, no se tiraba a la basura, recordemos que las personas son seres pensantes pero también sensibles, las heridas nos marcan, hagamos menos personas heridas, participemos en un amor que sea de verdad sentimiento en acción.
Amar al otro, debe empezar en nosotros eso si es sentir, no en base a lo que el otro me ama, pues entonces no siento respondo, se llama condicionamiento, deja de ser amor para convertirse en un trato.
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